23.9.11
Jose L
La saga Gears of War echa el cierre con una entrega im-pres-cin-di-ble, consolidando a la franquicia como una de las mejores de la historia en lo que a acción se refiere. Con un guión memorable y una jugabilidad apabullante Gears of War 3 demuestra su excelencia y nos invita a vivir el final de la aventura de Marcus Fenix y el pelotón Delta. Un título rotundo en todos los sentidos.
A grandes rasgos lo que ocurre en Gears of War 3 es que el pelotón Delta se encuentra refugiado en un barco en alta mar, lejos de Locust y de Lambent, y tanto Marcus como Dominic empiezan a vivir angustiados por sus propios demonios. Sin embargo, enseguida los Lambent les atacan con sus temibles tentáculos, lo que pone en marcha una campaña épica de cinco actos. El componente narrativo de Gears of War 3 es un absoluto triunfo debido al carisma de Marcus Fenix y el pelotón Delta y a un factor emotivo que se encuentra muy presente y que hará que sintamos empatía por las diferentes historias de los personajes.
A nivel jugable hay muy pocos cambios, ni falta que hacen. Eso sí, manejaremos a Cole Train en primera persona durante buena parte del primer capítulo y, en otro sentido, los Lambent ganan un peso específico debido a su comportamiento anárquico y frenético. Ante los Locust habremos de actuar diferente, manejando las armas con precisión y utilizando pacientemente las coberturas ante un enemigo de gran rigor táctico. Asimismo, hay un cierto componente de variedad que se ve acrecentado gracias a secciones como el paseo a bordo de una de las barcazas Locust.
La campaña nos llevará unas 15 horas en el nivel de dificultad Elevada, si bien la duración aumenta si tratamos de superarla en el desafiante modo Locura. Todo conforma una experiencia larga y satisfactoria, cuya diversión se multiplica enormemente si decidimos disfrutar del Modo Historia con amigos gracias a un épico cooperativo para hasta cuatro usuarios. Hay también dentro del cooperativo un modo arcade que registra nuestras puntuaciones y efectividad en combate, lo que nos hará competir con nuestros amigos para ver quién es el mejor.
Pero a lo que dedicaremos más tiempo es al multijugador competitivo, que presenta las mismas modalidades de Gears of War 2: Duelo por Equipos, Zona de Guerra, Ejecución, Capturar al Líder, Rey de la Colina y Piloto; ninguna varía en exceso con respecto al juego anterior. Presenta partidas para un máximo de diez jugadores y unos mapas más grandes, pero no innova apenas en ningún sentido. ¿Dónde destaca? Pues en lo tecnológico, sobre todo en la velocidad, en la inexistencia del lag o en la desaparición de aspectos negativos como la ventaja del anfitrión.
El modo Horda y el modo Bestia completan las modalidades de juego. En la primera deberemos combatir contra oleadas de Locust. Debutan los mutadores: unos efectos que dotan de mayor comicidad a las partidas y que pueden incrementar la experiencia que obtengamos en cada ronda. Sin embargo, la mayor novedad radica en que todo lo que hagamos nos ayudará a progresar y a desbloquear diferentes opciones que podremos utilizar en los espacios muertos entre oleada y oleada para poner trampas o comprar armas. Por su parte, en el modo Bestia es al contrario: somos los temibles alienígenas y debemos acabar con los supervivientes que se parapetan en el escenario, pudiendo utilizar personajes como los tickers o los clásicos drones de ataque. Poco que objetar al multijugador, la verdad.
Aunque suene sorprendente Gears of War 3 es el mejor título de la saga a nivel visual. Es este un juego rotundo también en lo artístico, ofreciendo una serie de escenarios variados y un foco ampliado hacia lo épico; a menudo estaremos al borde de acantilados imponentes o ante majestuosas construcciones.
La iluminación es portentosa, los modelados más detallados que nunca, los efectos visuales para las armas brutales... Nada se le escapa al juego, que además presenta muchas cinemáticas de acabado casi cinematográfico. En cuanto a lo sonoro, la banda sonora es muy potente, con algunos momentos absolutamente prodigiosos. El equipo de doblaje en nuestro idioma es el habitual y los efectos de audio rinden adecuadamente.
Gears of War 3 ya está disponible para Xbox 360.
En cuanto a calidad Gears of War 3 es el mejor título de la saga. Buena historia - esta vez con un marcado componente emocional -, gran experiencia jugable, uno de los mejores multijugadores que se pueden encontrar... Implacable en lo visual y en lo tecnológico, el juego de Epic Games sólo peca un poco de falta de innovación. Nada que no empañe a una entrega casi perfecta, un broche de oro para una franquicia de leyenda.
A grandes rasgos lo que ocurre en Gears of War 3 es que el pelotón Delta se encuentra refugiado en un barco en alta mar, lejos de Locust y de Lambent, y tanto Marcus como Dominic empiezan a vivir angustiados por sus propios demonios. Sin embargo, enseguida los Lambent les atacan con sus temibles tentáculos, lo que pone en marcha una campaña épica de cinco actos. El componente narrativo de Gears of War 3 es un absoluto triunfo debido al carisma de Marcus Fenix y el pelotón Delta y a un factor emotivo que se encuentra muy presente y que hará que sintamos empatía por las diferentes historias de los personajes.
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| Coberturas, fuego a ciegas, armas poderosas, enemigos muy inteligentes... Casi nada ha cambiado en el universo Gears of War |
A nivel jugable hay muy pocos cambios, ni falta que hacen. Eso sí, manejaremos a Cole Train en primera persona durante buena parte del primer capítulo y, en otro sentido, los Lambent ganan un peso específico debido a su comportamiento anárquico y frenético. Ante los Locust habremos de actuar diferente, manejando las armas con precisión y utilizando pacientemente las coberturas ante un enemigo de gran rigor táctico. Asimismo, hay un cierto componente de variedad que se ve acrecentado gracias a secciones como el paseo a bordo de una de las barcazas Locust.
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| Gears of War 3 hace acopio de verdaderos momentos épicos |
La campaña nos llevará unas 15 horas en el nivel de dificultad Elevada, si bien la duración aumenta si tratamos de superarla en el desafiante modo Locura. Todo conforma una experiencia larga y satisfactoria, cuya diversión se multiplica enormemente si decidimos disfrutar del Modo Historia con amigos gracias a un épico cooperativo para hasta cuatro usuarios. Hay también dentro del cooperativo un modo arcade que registra nuestras puntuaciones y efectividad en combate, lo que nos hará competir con nuestros amigos para ver quién es el mejor.
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| Disfrutar del título acompañados es algo para recordar, ya sea a pantalla dividida o a través de internet |
Pero a lo que dedicaremos más tiempo es al multijugador competitivo, que presenta las mismas modalidades de Gears of War 2: Duelo por Equipos, Zona de Guerra, Ejecución, Capturar al Líder, Rey de la Colina y Piloto; ninguna varía en exceso con respecto al juego anterior. Presenta partidas para un máximo de diez jugadores y unos mapas más grandes, pero no innova apenas en ningún sentido. ¿Dónde destaca? Pues en lo tecnológico, sobre todo en la velocidad, en la inexistencia del lag o en la desaparición de aspectos negativos como la ventaja del anfitrión.
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| Podremos revisitar partes inéditas de la campaña una vez la superemos por primera vez |
El modo Horda y el modo Bestia completan las modalidades de juego. En la primera deberemos combatir contra oleadas de Locust. Debutan los mutadores: unos efectos que dotan de mayor comicidad a las partidas y que pueden incrementar la experiencia que obtengamos en cada ronda. Sin embargo, la mayor novedad radica en que todo lo que hagamos nos ayudará a progresar y a desbloquear diferentes opciones que podremos utilizar en los espacios muertos entre oleada y oleada para poner trampas o comprar armas. Por su parte, en el modo Bestia es al contrario: somos los temibles alienígenas y debemos acabar con los supervivientes que se parapetan en el escenario, pudiendo utilizar personajes como los tickers o los clásicos drones de ataque. Poco que objetar al multijugador, la verdad.
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| El sentido de la progresión es un gran punto. Todo lo que hacemos suma |
Aunque suene sorprendente Gears of War 3 es el mejor título de la saga a nivel visual. Es este un juego rotundo también en lo artístico, ofreciendo una serie de escenarios variados y un foco ampliado hacia lo épico; a menudo estaremos al borde de acantilados imponentes o ante majestuosas construcciones.
La iluminación es portentosa, los modelados más detallados que nunca, los efectos visuales para las armas brutales... Nada se le escapa al juego, que además presenta muchas cinemáticas de acabado casi cinematográfico. En cuanto a lo sonoro, la banda sonora es muy potente, con algunos momentos absolutamente prodigiosos. El equipo de doblaje en nuestro idioma es el habitual y los efectos de audio rinden adecuadamente.
Gears of War 3 ya está disponible para Xbox 360.
En cuanto a calidad Gears of War 3 es el mejor título de la saga. Buena historia - esta vez con un marcado componente emocional -, gran experiencia jugable, uno de los mejores multijugadores que se pueden encontrar... Implacable en lo visual y en lo tecnológico, el juego de Epic Games sólo peca un poco de falta de innovación. Nada que no empañe a una entrega casi perfecta, un broche de oro para una franquicia de leyenda.
Nos leemos.
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